Presidencia de Astaná (Kazajistán) en el Fondo Internacional para Salvar el Mar de Aral

La crisis del agua en México se ha convertido en un desafío urgente que afecta a millones de personas en el país. De su población de 127 millones de personas, los limitados recursos hídricos de México podrían tener implicaciones económicas generalizadas y los desafíos incluyen escasez de agua y sequías en gran parte del país, desde las regiones áridas y desérticas del norte del país hasta los trópicos soleados del sur. La escasez de agua es cada vez más común como resultado del cambio climático global y la mala gestión de los recursos hídricos. Los acuíferos en México están en riesgo de sobreexplotación.

Se trata de un problema complejo que requiere una gestión sostenible a largo plazo, una inversión continua en infraestructura y una conciencia pública sobre la importancia de conservar este recurso vital. La comunidad internacional también desempeña un papel crucial en la colaboración para abordar los desafíos mundiales del agua. Superar esta crisis es esencial para garantizar un futuro sostenible para las generaciones venideras.

Como vemos, es un problema compartido con Kazajstán, por lo que debemos tomar conciencia a nivel global.

Presentamos un artículo que nos muestra el problema ambiental del Mar de Aral, la complejidad de esta crisis y las medidas para abordarla, desde las advertencias del Fondo Internacional para Salvar el Mar de Aral (IFAS), expertos académicos hasta iniciativas gubernamentales encaminadas a Desarrollar un programa regional para que nuestros lectores sepan lo que sucede al otro lado del mundo.

Estimado lector me llamo Askhat Orazbay y soy el Presidente del Comité Ejecutivo del Fondo Internacional para Salvar el Mar de Aral (IFAS, en sus siglas en inglés), que Kazajstán presidirá durante 2024-2026.

Me gustaría compartir con el público las actividades del IFAS destinadas a mejorar la situación en la cuenca del mar de Aral y que durante 30 años han servido a los intereses de los pueblos y Estados de Asia Central.

En las realidades modernas, con el crecimiento demográfico universal, el rápido ritmo de desarrollo de las economías estatales y el aumento del consumo específico de agua per cápita, la carga sobre el medio ambiente natural ha ido en aumento constantemente. Esta intensificación del impacto antropogénico provoca y acelera los procesos de cambio climático global. En Asia Central, todos estos procesos avanzan a un ritmo más acelerado que en la media del planeta.

La crisis ecológica de la cuenca del Mar de Aral va acompañada de un déficit y una contaminación progresivos de los recursos hídricos, la degradación del suelo y la desertificación de vastos territorios, la pérdida de bosques, paisajes ecológicos y biodiversidad.

En la vasta superficie del lecho desecado del mar de Aral se ha formado un nuevo desierto -Aralkum- de más de 54 mil kilómetros cuadrados (a título comparativo: es comparable al territorio de Croacia y mucho mayor que el de Estonia, Dinamarca, Países Bajos y Suiza).

En estas tensas condiciones, la elaboración de nuevos mecanismos para el desarrollo de la cooperación en la región es muy relevante para los estados de Asia Central. El principal objetivo de la presidencia de la República de Kazajstán en IFAS es seguir aumentando el nivel de cooperación en el uso integrado y la protección de los recursos hídricos, la solución de los problemas medioambientales, los aspectos socioeconómicos y la introducción de elementos de economía «verde» en los países de Asia Central.

Durante la presidencia de Kazajstán continuaremos la aplicación de dos programas principales aprobados por la Junta directiva del IFAS: el Programa de Acción para la Asistencia a los Países de la Cuenca del Mar de Aral (ASBP-4 en sus siglas en inglés) y su seguimiento sistemático, así como el Programa Regional de Protección Medioambiental para el Desarrollo Sostenible de Asia Central (REP4SD- CA en sus siglas en inglés). El periodo de aplicación de ambos Programas es hasta 2030.

El problema medioambiental del Mar de Aral comenzó a manifestarse en los años sesenta y setenta y llevó a que prácticamente no quede prácticamente nada del cuarto lago más grande de nuestro planeta. Primero el mar de Aral se dividió en dos masas de agua, luego en tres, etc.

Durante los años de la Independencia, Kazajstán, con el apoyo del Banco Mundial, llevó a cabo obras integrales y consiguió restaurar una pequeña parte, el Pequeño Aral o Mar de Aral del Norte, pero se trata solo de un 8% del estado prístino. La ciudad portuaria de Aralsk aún está lejos del agua, que al principio se alejaba 100 kilómetros, pero tras las medidas tomadas se ha acercado mucho más.

Las partículas y el polvo de sales y sustancias químicas venenosas que quedan en el lecho desecado del mar de Aral se encuentran no solo en las montañas de Tien Shan y Pamir, sino también mucho más allá de nuestra región. Para reducir la eliminación de sustancias nocivas, los países de la región del mar de Aral participan activamente en medidas fitomelitivas, plantando saxaul y otra vegetación.

Pero, ¿es tan eficaz plantar plantas en el antiguo fondo de una masa de agua? ¿Cuál es el estado actual de los ecosistemas? Como se sabe, debido a varios años seguidos de estiaje, el caudal del Syr Darya ha disminuido y el volumen de agua del Mar de Aral septentrional ha bajado del máximo de 27 a 20 kilómetros cúbicos.

Las capturas de peces han disminuido, lo que afecta negativamente al empleo de la población local. Una vez más aumenta la morbilidad de la población debido a la desertización y al deterioro de la calidad del agua… ¿No volverá a repetirse la tragedia? ¿Cuáles son los estados de ánimo y los planes de los residentes locales? Son muchas preguntas y todas están interrelacionadas.

En el Cuarto Programa de Acción para la Asistencia a los Países de la Cuenca del Mar de Aral (ASBP-4), que he mencionado antes, debemos estudiar toda la gama de problemas y trabajos que se están llevando a cabo e intentar resolverlos antes y con mayor eficacia.

El Cuarto Programa de Acción para la Asistencia a los Países de la Cuenca del Mar de Aral (ASBP-4), que he mencionado antes, tiene una línea de acción principal separada sobre medio ambiente, que consta de 12 propuestas de proyectos.

Quisiera señalar que se han previsto acciones conjuntas de adaptación al cambio climático, incluidas medidas para adaptar los sectores más vulnerables: agua y agricultura, agua potable, energía, biodiversidad, bosques, pastos y ecosistemas de montaña. Se preveía desarrollar un plan de acción regional sobre adaptación al cambio climático y, gracias al apoyo del Programa Verde de Asia Central de la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), nuestros cinco países elaboraron y adoptaron la Estrategia Regional de Adaptación al Cambio Climático en Asia Central.

Asimismo, se prevé que la difusión de las mejores prácticas agrícolas adaptadas al clima. Tendremos que desarrollar un programa regional para la protección de los recursos biológicos en Asia Central, aplicar medidas para preservar y restaurar los ecosistemas de las cuencas de nuestros principales ríos: el Amu Darya y el Syr Darya, y proseguir la plantación sistemática de bosques en la zona del Mar de Aral y en el lecho desecado de este mar.

Los siguientes proyectos de la dirección ecológica prevén el desarrollo del sistema de vigilancia del medio ambiente y los recursos hídricos en la región del mar de Aral y en los fondos marinos desecados; el desarrollo de innovaciones y tecnologías ecológicas en la zona del mar de Aral.

Considero muy importante un proyecto como «Mejora de la calidad del agua en ríos y embalses teniendo en cuenta las normas internacionales, eliminación y prevención de la contaminación, incluidos los residuos industriales». Kazajstán y otros países están trabajando para adherirse al Protocolo sobre Agua y Salud del Convenio sobre la Protección y Utilización de Cursos de Agua Transfronterizos y Lagos Internacionales, y Uzbekistán se ha adherido recientemente.

La reducción de los riesgos de catástrofe asociados a las inundaciones, los flujos de lodo y las sequías en la cuenca del Mar de Aral, el estudio de los glaciares en el curso superior de los ríos transfronterizos, el desarrollo de corredores ecológicos transfronterizos, las redes regionales de áreas naturales especialmente protegidas para la conservación de la biodiversidad… esta es una lista incompleta de los proyectos que tenemos que promover durante nuestra presidencia en IFAS.

En cuanto a las nuevas iniciativas que se llevarán a cabo en el marco de la presidencia kazaja en la IFAS, se trata de la creación de un mecanismo de cooperación regional sostenible y a largo plazo para el uso eficaz de los recursos hídricos y energéticos en Asia Central, que tenga en cuenta los intereses de todos los países de la región en los sectores del regadío, la energía hidroeléctrica y la ecología.

También es necesario un trabajo sistemático para introducir un sistema automatizado unificado de contabilidad, control, gestión y distribución de los recursos hídricos en la cuenca del mar de Aral. El Presidente de la República de Kazajstán, Kassym-Jomart Kemelevich Tokáyev, en la reunión del Consejo de Jefes de los Estados Fundadores del IFAS, celebrada el 15 de septiembre de 2023 en Dushanbe, instó a las partes a empezar a aplicar estas iniciativas.

Es fundamental reforzar la cooperación regional con los socios internacionales para el desarrollo, las agencias de la ONU, las instituciones financieras y la comunidad de donantes. También es aconsejable intensificar las actividades en el marco de los convenios, planes de acción, declaraciones y declaraciones conjuntas internacionales sobre medio ambiente generalmente aceptados.

En el periodo 2024-2026 Kazajstán tomará medidas para poner en práctica las instrucciones y los acuerdos alcanzados por los Jefes de Estado en la Cumbre IFAS del 15 de septiembre de 2023 en Dushanbe, así como los acuerdos y compromisos anteriores, lo que garantizará la coherencia de las acciones de la Asia Central para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible globales y su posicionamiento como región única.

Respetuosamente,